El rol clave del líder en la estrategia de ciberseguridad

El aumento y el perfeccionamiento del cibercrimen requiere incrementar la capacidad de las organizaciones de adaptarse a nuevas practicas y hábitos de ciberseguridad. El líder juega un rol clave en este proceso de adaptación.

Por Raymundo Peixoto, SVP Data Center Solutions

Este año Dell Technologies publicó un estudio[1], basado en la experiencia de 10,500 encuestados de más de 40 ubicaciones, que subraya la importancia de preparar a las personas para el cambio, además de revelar la complejidad que conlleva impulsar la transformación digital de las organizaciones. Al comprender los comportamientos humanos y la manera de incorporar conocimiento, y cómo se logra la toma de conciencia, las empresas pueden convertir a los empleados en una fuente de energía positiva para impulsar el cambio. Desde el punto de vista de la seguridad, el estudio revela que:

  • El 43.1% de los trabajadores de Latinoamérica admiten que no han mejorado sustancialmente sus hábitos de seguridad a pesar del creciente número de ataques cibernéticos/ransomware

Esto es realmente preocupante porque implementar una estrategia de seguridad implica cambios en los hábitos y costumbres de las personas. El cambio puede ser incómodo y la incertidumbre que genera puede desencadenar una variedad de respuestas emocionales que impactarán en la calidad y el rendimiento laboral. Aquí entra en juego el rol del líder, de quien se espera que genere las condiciones necesarias en su equipo de trabajo para que se produzcan las adaptaciones requeridas en prácticas y comportamientos relacionados a la seguridad.

Para habilitar una cultura organizacional donde la seguridad es trabajo de todos, los líderes tienen la responsabilidad especial de comprender, moldear y alinear las creencias, valores y actitudes de toda la organización con los objetivos generales de seguridad.

Liderando con empatía todo se transita más fácil

Muchas implementaciones de ciberseguridad aún no están diseñadas para el usuario final, con casi la mitad de los trabajadores abrumados por tecnologías complejas. Dado que se trata de una problemática con un fuerte componente individual, implementar una cultura de ciberseguridad requiere que los miembros del equipo y los líderes interactúen y se comuniquen con empatía -la capacidad de compartir y comprender las emociones de los demás-. Por esta razón, lo primero que el líder debe desarrollar, en el marco de la promoción y concientización sobre el rol de todas las personas para contribuir a la seguridad de la organización, es la empatía. Los gestos que demuestran la empatía de un líder en un contexto de incertidumbre, como el que plantea la Era de los Datos, son:

  • solicitar comentarios de sus colaboradores,
  • ser sensible a los desafíos que enfrentan,
  • adaptarse y brindar capacitación y apoyo,
  • ofrecer escucha activa, y
  • generar acciones concretas de acuerdo con esa escucha,
  • asegurarse de escuchar a todos, no sólo a los más ruidosos, porque sólo podrá captar la totalidad si reúne retroalimentación de diversos puntos de vista,
  • tener en cuenta los vínculos emocionales con la TI y los procesos heredados, incluso, aquellos de los que la gente se quejaba no hace mucho tiempo.

La transparencia y la comunicación abierta son valores que garantizan que los miembros del equipo estén alineados y preparados para realizar cambios significativos, sintiéndose apoyadas, confiadas y seguras.

Predicar con el ejemplo

Un aspecto clave que los líderes no deben olvidar es que son el ejemplo a seguir. No existe nada más fuerte que predicar con el ejemplo para influir en los comportamientos y las creencias. Cuando los miembros del equipo ven a los líderes priorizando y participando en actividades de seguridad cibernética, entonces es más factible que ellos también lo hagan.

Más allá del ejemplo que el líder debe dar, su participación también se refleja en otras oportunidades; puede ser en forma de comunicación de políticas o en acciones que protegen específicamente a la organización, como financiar/asistir a capacitaciones, facilitar iniciativas de concientización, participar en otras actividades de seguridad cibernética, diseñar programas que sean inclusivos sobre cómo convivir y trabajar de manera segura, y más.

¡Vamos!, su equipo lo espera

Su mayor contribución a la estrategia de ciberseguridad de su organización es desplegar al máximo sus aptitudes como líder, y si siente que aún no está preparado, entonces, comience ya mismo a tomar acción: la Era de los Datos es ahora y requiere líderes proactivos, dispuestos a transitar la transformación digital con equipos confiados.

[1] www.dell.com/breakthrough